Como ustedes deben saber, yo, monarca de Jurica (uno de ellos), me encuentro en el reino conocido como "México", trabajando, inhalando smog y más que nada pendejeando. Pero también deben estar al tanto de que para que el monarca (o uno de ellos) de un reino pueda no sólo visitar, si no realmente residir en un reino vecino, debe pasar por el debido protocolo reglamentario, para evitarse problemas, digo. Y mi actual reino de residencia no es excepción, si no hubiera yo hecho los arreglos necesarios me encontraria en estos momentos siendo el blanco de la despiada legión de Pan de Muerto.
Y no, no fui a hablar con el Peje. Personalidades como él son sólo frentes para que los verdaderos regidores puedan hacer de las suyas sin ser moelstados por el ojo público. El monarca de estos rumbos es en realidad "ella", una autoproclamada reina de distraidos, pero penetrantes, ojos cafes.
Siguiendo el protocolo la reunión tuvo lugar en el sagrado sitio conocido por los locales como "Pericoapa". La tradición exige que el monarca interesado en permiso de residencia (yo) introduzca un clavel en su fosa nasal, de esta forma buscando a la monarca residente, que debe llevar los ceremoniales calcetines rojos con bolitas blancas. Llevarlos en las manos, claro.
"Así que tú eres el monarca interesado en quedarse en mi reino?" oí de repente a mis espaldas, provocando que la ráfaga de viento, fruto de mi sorprendido grito femenino de susto, catapulteara el clavel que llevaba en la nariz unos dos metros.
"Asi es, yop." comenté con toda la gracia de alguien que acaba de gritar como niña histérica.
La monarca asintió y se qutió los calcetines de las manos con un exasperado gesto, aventándolos en la misma dirección del fugitivo clavel. "De que reino vienes, perdon?" pregunto despúes de escanearme con sus marrones ojos.
"De la República Independiente de Jurica" proclamé, inflando el pecho.
"Eh?", contestó con cara de what
"Jurica!" repetí con exasperado gesto.
Exhalé resigando notando su continua cara de maaaaande, "No habrás oído de él todavia, pero lo harás, creéme."
Ella asintió (con gesto de "pobre idiota", algún otro narrador podria narrar), y me señaló con la mano que caminara con ella por los concurridos pasillos de Pericoapa.
"Aquí es dónde los más temibles piratas de la región hacian de las suyas en antaño, sabías?" me comentó mientras presenciabamos como los numerosos negocios del lugar funcionaban con aire de superioridad.
"Interesante. Pero me alegro que ahora sea sólo un honrado lugar de negocios" respondí, aburrido por la falta de balazos y explosiones.
Repentinamente ella se detuvo y clavandome la mirada con gesto de actriz porno dijo: "Alguna vez te han dicho que recuerdas mucho a Pedro Picapiedra?"
"Ehhh.....tal vez."
Asintió misteriosamente y siguió caminando. "Muy bien, entonces quieres mi bendición para echarla aqui en vez de en tu pueblito, cierto?"
"Jurica es el mayor exportador de piedras del mundo!!" le dije indignado
Ella: "Aja.....tons, si o no?"
Yo: "Si, un tiempo nada más."
Ella: "Vas a traer ejército? Juripsa acaso tiene?"
Yo: " 'JuriCa!' Y sí, tiene un improtante ejército....pero no viene conmigo, vengo de incógnito."
Ella: "Perfecto. Alguna mascota no endémica de mi reino?"
Yo: "Visitas frecuentes de un adorable dinosaurio."
Ella: "Con permiso para mascotas preshistóricas?"
Yo: (recordando) "eeehh.....seeeee"
Ella: "Ok...algo más?"
Yo: "Mmmm...un zombie"
Ella: "Amaestrado??!?"
Yo: "Vegetariano."
Ella: "Ah ok."
Se volvió a detener y con los brazos cruzados dijo: "Ok, no veo porque no dejarte tar aqui, pero para hacerlo oficial tienes que cumplir con el último requisito."
Yo: "Cual es?"
Ella: "Pasar una noche en la cama conmigo"
Yo: "....haciendo que?!"
Ella: "pues...jugar Nintendo y pedir pizza, tal vez pintarnos las uñas----que mas??"
Y despúes de esa noche tengo free access a la ciudad, pero no puedo traer de fuera ningún ser vivo sin genitales, fue estricta con eso.
1 comment:
este fue un buen post, me recuerda lo que vale la pena leer, deberia de ir en tu top 15
Post a Comment